Qué hacer en caso de una posible negligencia médica
A lo largo de mi carrera como doctora y perito médico, he conocido a muchas personas que llegan con la misma pregunta: “No sé si lo que me ha pasado es una negligencia médica, pero algo no me cuadra”. Y es completamente comprensible. Cuando sufrimos un daño tras recibir atención sanitaria, es normal sentir confusión, preocupación e incluso culpa por plantearse si todo se hizo correctamente. En este artículo quiero ayudarte a entender, paso a paso, qué puedes hacer si tienes esa duda, sin prejuzgar a nadie, pero sin quedarte con la incertidumbre.
¿Tienes dudas sobre una atención médica que recibiste tú o un familiar?
Es normal. A veces, tras una operación, un parto, una consulta o un diagnóstico tardío, sentimos que algo no encajó. Puede que no te hayan dado explicaciones claras, que el tratamiento haya ido mal o que simplemente te hayas quedado con la sensación de que no se hizo todo lo posible.
En esos momentos, es lógico preguntarse: ¿Fue esto una negligencia médica? ¿Estoy exagerando? ¿Puedo hacer algo sin acusar a nadie injustamente?
Este artículo te ayudará a dar los primeros pasos, con rigor y prudencia. No está pensado para buscar culpables, sino para orientarte con profesionalidad y respeto hacia los profesionales de la salud.
¿Tiene sentido que consultes tu caso?
Te dejo algunas preguntas que pueden ayudarte a valorar si es momento de pedir asesoramiento profesional:
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¿Hubo un resultado inesperado o muy negativo tras una atención médica?
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¿Te dieron explicaciones poco claras o contradictorias?
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¿Sientes que no se actuó a tiempo o que hubo falta de seguimiento?
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¿Tienes un informe médico que no entiendes y te genera inquietud?
Si has respondido que sí a alguna de estas preguntas, es totalmente razonable que busques aclaraciones. Consultar no significa acusar, sino entender. Y ese es el primer paso, es una de las cosas que valora un perito médico.
¿Qué se considera una negligencia médica?
La negligencia médica no se define por el simple hecho de que un tratamiento no haya dado el resultado esperado. Se habla de posible negligencia cuando un profesional sanitario se aparta de los estándares clínicos reconocidos (lex artis) y ese hecho provoca un daño evitable al paciente. Pero es importante subrayar que no todo error médico implica negligencia, ni toda complicación clínica es imputable a una mala praxis.
Cada situación debe ser analizada de forma individual y objetiva, con asesoramiento técnico y jurídico especializado.
Situaciones que podrían hacer sospechar de una posible negligencia
Existen ciertos escenarios que, sin afirmar que exista una responsabilidad médica, pueden generar dudas razonables:
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Retrasos prolongados en el diagnóstico de enfermedades graves
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Intervenciones quirúrgicas con complicaciones inesperadas
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Olvido de material quirúrgico en el interior del paciente
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Prescripción errónea de medicamentos
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Problemas derivados de una falta de seguimiento clínico adecuado
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Incidentes durante el parto con consecuencias para el bebé o la madre
Ante cualquiera de estas situaciones, lo más sensato es recabar información y solicitar un informe médico pericial profesional que permita determinar si lo ocurrido entra dentro de la normalidad clínica o si podría tratarse de una actuación incorrecta.
¿Qué hacer si tienes dudas sobre la atención médica recibida?
Si has sufrido un daño y consideras que podría estar relacionado con la atención médica recibida, estos pasos pueden ayudarte a aclarar la situación:
Recopila toda la documentación médica
Solicita tu historia clínica completa: informes, pruebas, recetas, partes quirúrgicos… Esta documentación es fundamental para poder analizar objetivamente lo ocurrido y valorar si la atención sanitaria que recibiste se ajustó a los estándares clínicos.
Consulta con un profesional experto
Es muy recomendable que te asesores con un equipo que combine tanto el conocimiento médico como el legal. Un abogado especializado en derecho sanitario y un perito médico pueden ayudarte a entender tu caso desde una perspectiva técnica, evitando suposiciones o conclusiones precipitadas.
Obtención de un informe pericial médico
El informe pericial es la pieza clave para determinar si ha existido una mala praxis. El perito médico analiza si la actuación sanitaria fue conforme a la lex artis (los estándares clínicos reconocidos). No parte de una posición acusatoria, sino objetiva y técnica.
Determinar la vía de reclamación, si procede
Si tras el análisis experto se concluye que hubo una actuación incorrecta que causó un daño, entonces se puede valorar iniciar una reclamación. Existen diferentes vías según el tipo de caso:
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Vía civil, para solicitar una indemnización económica.
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Vía penal, si se considera que ha existido una imprudencia grave.
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Vía contencioso-administrativa, si el caso ocurrió en un centro público.
Cada vía tiene requisitos y plazos diferentes, por eso es tan importante contar con el asesoramiento adecuado desde el principio.
Plazos para reclamar
Los plazos legales son limitados, por lo que es importante consultar lo antes posible. En general:
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1 año desde que se conoce el daño en vía civil y contencioso-administrativa.
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Plazos variables en vía penal, según la tipificación del delito.
Es importante recordar que el inicio del plazo suele contar desde que el paciente tiene conocimiento claro del daño, no necesariamente desde la fecha de la intervención médica.
¿Qué tipo de indemnización podría corresponder?
Si tras el análisis experto se concluye que ha existido una negligencia, se podrá reclamar una compensación económica. La cuantía dependerá de múltiples factores: gravedad del daño, edad, secuelas, pérdida de ingresos… Cada caso se valora de forma individual, con el apoyo de informes médicos y legales.
¿Cuándo puede constituir un delito?
La vía penal solo se contempla en los casos más graves, donde existe imprudencia profesional de carácter severo. No todo error médico es delito, y se exige una carga probatoria elevada. Por eso, el análisis previo es fundamental para decidir si esta vía es viable o no.
¿Y si no tengo claro si ha sido una negligencia?
Esta es una de las situaciones más comunes. Muchos pacientes sienten que algo no fue bien, pero no tienen la certeza de si hubo error médico. En estos casos, lo más responsable es consultar con un profesional que valore el caso desde una perspectiva neutral, sin prejuicios ni suposiciones.
Puedes ponerte en contacto conmigo si tienes dudas sobre tu caso. Estudiaré tu situación con calma y, si lo necesitas, puedo elaborar un informe de viabilidad médica que te ayude a entender si realmente hay base para reclamar.
Conclusión: ante la duda, información y prudencia
Ante cualquier sospecha o inquietud, es importante actuar con serenidad. Ni todo error es negligencia, ni toda complicación médica es evitable. Recopilar información, dejarse asesorar por expertos y no emitir juicios apresurados son los pilares para actuar de forma justa, tanto para el paciente como para los profesionales sanitarios.
Preguntas frecuentes sobre qué hacer ante una negligencia médica
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¿Qué se puede hacer en caso de negligencia médica?
Lo primero es no precipitarse ni asumir nada. Si tienes dudas razonables sobre la atención médica que has recibido, lo más importante es recopilar la documentación clínica y buscar asesoramiento especializado. Yo puedo ayudarte a valorar tu caso desde el punto de vista médico y explicarte si hay motivos para iniciar algún tipo de reclamación.
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¿Qué tengo que hacer para denunciar una negligencia médica?
Antes de presentar ninguna denuncia, es fundamental contar con un análisis técnico que confirme si realmente hubo una mala praxis.
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¿Qué se requiere para demostrar una negligencia médica?
Se necesita, sobre todo, un informe pericial que acredite que la actuación del profesional sanitario se apartó de lo que se considera una atención médica adecuada, y que ese error provocó un daño. Ese es precisamente mi trabajo como perito médico: estudiar el caso con objetividad y determinar si la atención fue correcta según los estándares clínicos.